
(Tribute. 10th Anniversary)
Las Silkstones, también conocidas como BFMC (Barbie Fashion Model Collection) son las culpables, sin la menor duda, de la clase de coleccionista en la que he llegado a convertirme.

(Walking Suit )
No fueron el único factor causante, desde luego. Hubo un primer enganche a Barbie, de enanísima, por culpa (o gracias a, según se mire) la vecina de mi abuela, que me enseñó por primera vez esta muñeca tan increíble, enganche del que nunca llegué a recuperarme del todo; pero la entrega absoluta y sin miramientos a invertir en esto de las muñecas vino de la mano de las silkstones.

(City Smart)
Aunque nunca había dejado de coleccionar desde pequeña, la intensidad con la que lo hacía sí decayó con los años, hasta hacerse algo prácticamente testimonial. Entonces llegó ella. Año 2004 aproximadamente…yo acababa de suspender un examen y mi padre, para animarme, me apareció en casa con la Silkstone 45 Aniversario.
El flechazo fue inmediato. Esa cara de antipática tan atractiva, con un rollo marcadamente retro, esculpida en un material extrañísimo, con un nombre que me sonaba a encimera de cocina, me conquistó. Además, venía con ropa bien cosida (y eso que no es de las mejores de la línea), joyas de metal, buena presentación en caja…sólo sabía entonces que necesitaba más. Y ahí empezó el primer problema. Las jugueterías de toda la vida, esos lugares en extinción, no las solían vender, al menos por donde vivía y, si encontraba alguna, el precio era prohibitivo.

(The Soiree)
Empecé a buscarlas por internet y fui familiarizándome con la colección BFMC y, ya de paso, con otras clases de muñecas también destinadas al público adulto, como Tonner o Integrity. Esta etapa voyeurista duró bastante tiempo y llenó el disco duro de mi antiguo ordenador…hasta que por fin me decidí a abrir cuenta en ebay, en paypal…y ya por último dar el salto definitivo y empezar a comprar en el otro lado del charco.

(Market day)
Con un cambio dólar/euro buenísimo y unos gastos de envío que por aquel entonces no llegaban a los diez dólares por una muñeca en caja, mi colección creció rápidamente. Tuve mi momento quitaespinitasSuperstar también y pronto aparecieron nuevas necesidades junto con las Silkstone…aunque eso es ya otra historia 😉