Parece que esto va camino de ser la obra del Escorial, pero no. Nos costó arrancar (malditas licencias municipales) pero ahora va todo muy rápido, incluso demasiado. Estas últimas semanas no hemos parado de visitar tiendas, naves y almacenes. Y es muy complicado, ya os lo voy advirtiendo….incluso teniendo la ayuda de una interiorista maravillosa como la nuestra, porque aunque descargamos casi todo en ella y a estas alturas creo que la necesitamos tanto como el respirar, al mismo tiempo nos abre a propuestas y posibilidades que nunca se nos hubiesen ocurrido, con lo que toca volver a ver, comparar y decidir.
Para que me entendáis, a ver, confesad, ¿alguna vez habíais pensado seriamente en qué grifo queríais para la pileta del baño?, de verdad, ¿de pequeños a lo que aspirabais era a tener un buen trabajo para poder comprar el grifo de vuestros sueños?…Seguro que no. Pues entonces creo que ya podéis imaginaros mi tesitura a la hora de contestar a una pregunta directa del tipo «el grifo ¿empotrado en pared o en pileta? Pues eso, haríais como yo, diríais «y yo qué sé, un grifo normal». Y ahí descubrís que el concepto de «normal» ya no existe y grifos parece que hay millones.
Cuando leí El Perfume – esto creo que le pasó a todo el mundo -, durante una temporada me parecía que captaba todos los olores de mi entorno; luego volví a la normalidad y ya los noto sólo en verano y en el transporte público…Esto viene a que ahora sufro un efecto parecido y me fijo en los grifos que veo en todas partes: en el trabajo, en la cafetería en la que paro, en las revistas…algo que antes era imperceptible para mí, salta a mis ojos en todas partes. Y no sólo son los grifos (sus mandos y colores), de cada cosa hay múltiples posibilidades para elegir y aparecen conceptos como azulejos (o pondremos piedra, mejor madera, no?), mierda, ¿esto va brillante o mate?, ufff, las puertas…¿barniz natural o lacado en blanco, lo mismo con una pátina…?, ¿corredera?, ¿oculta?…y ¿qué tamaño?…se os va de precio, no, no…es bonito pero no sale nada bueno, descartado…oscilobatiente, eso ni se discute…(y paro aquí con los ejemplos, porque creedme, tengo para escribir una Biblia y creo que ya he resultado suficientemente ilustrativa).

Con licencia para matillar.
En fin, que con este panorama y con trabajo que me sale por las orejas (sobre todo por esto último, pero paso de aburriros con lo de siempre), soy presa del estrés, cada vez tengo más canas y para colmo me estoy poniendo como un bocoy…porque sepáis que yo supero la presión comiendo. En general supero casi todo comiendo, y eso no hay faja que lo contenga.
Y expuestas quejas y lamentos, recordando que esto es un blog de muñecas, ahí va la razón de la entrada (bastante clara a estas alturas): ya que tengo un diorama único (el piso en reformas) que va a durar poco (o con eso cuento), habrá que que sacarle partido…así que una de fotos a pie de obra, que me he pasado hace un rato para pipear cómo va…y además me he comprado un set de herramientas en miniatura que quiero estrenar.

Me pasaría horas mirando estas mini-herramientas.
Como véis aún queda mucho por hacer, pero mucha es la ilusión y la energía…que las calorías que me meto ¡son para algo!
En fin, que como toca seguir me despido ya; espero que hayáis disfrutado mis cutrefotos de móvil. Para compensaros, os dejo foto en condiciones de mi último suelo, ya que seguimos con la misma ropa 😉 :
PD: Ella lleva pañuelo de Victoria Barbie Designs y peto de Elenpriv, con camiseta de Clear-lan.
PD2: No, no voy a pintar ninguna pared del piso en azul. No me dejan. Venirme arriba con los suelos ya es otra historia…
Jajaja de grifos ni idea pero una cosa tengo segurísima: no me gustan esos váteres que estan suspensos en la pared, no me gustan ni un poquito, siempre siento que un dia se van a descolgar!
La caja de herramientas es una delicia!!
Me gustaMe gusta
¡Esos inodoros descartados! jajaja.
Me gustaMe gusta
Cool tools. My dolls would love to have them. 😉
And I admire your photos – so great!
Me gustaMe gusta
Thank you very much!
Me gustaMe gusta